domingo, 20 de enero de 2013

LOS GRANDES BOYEROS SUIZOS EN SUECIA

Os traigo hoy esta imagen de una familia sueca, aquí en Göteborg, paseando a sus hijos y sus perros al mismo tiempo. Es típico en Suecia el tener en casa dos perros en vez de uno (esta familia tiene tres), habitualmente de la misma raza por eso de que sean más parecidos en su carácter o quizás porque esa raza es del gusto de sus propietarios. En Suecia existe una ley que prohíbe que los perros permanezcan solos en casa durante más de 5 horas seguidas. Y de eso están bien concienciados los suecos, que acostumbran a contratar a un canguro o a dejarlos en guarderías durante la jornada laboral para recogerlos por la tarde. Por eso, siempre es una buena idea el tener dos perros en casa para que se hagan mutua compañía. Como os podéis imaginar, el perro de chalet o de finca, esos perros guardianes que se pasan el día abandonados en un recinto ladrando histéricamente a todo aquél que pasa por delante de la valla, tan habitual en España, no existe en Suecia como tampoco existe el perro sin hogar.
Pero volviendo a la foto que hoy os traigo y que he hecho esta misma mañana en las calles de Göteborg, los perros están ejerciciendo el trabajo para el que fueron tradicionalmente utilizados en su país de origen. Estos perros son boyeros de Berna o Boyeros de Montaña berneses. Se llaman "boyeros" porque son perros para el ganado vacuno, para los bueyes y las vacas. No para guiarlo sino para protegerlo pues son molosos de montaña, como lo son los mastines, entroncados en el mismo origen, en los ancestros tibetanos que trajeron los romanos en sus incursiones hacia el oeste. Miden hasta 7o cm a la cruz, así que son perros potentes que fueron usados también para la vigilancia de las granjas y el arrastre de carros de leches y quesos... o incluso de los carritos con los niños. Gran ayuda sobre todo en las cuestas ¿no?.
Perros de una imponente belleza y de un carácter equilibradísimo y cariñoso, son usados hoy día como perros de terapia e incluso de asistencia y resultan ser maravillosos dentro de la vida familiar.

 
Este Boyero de Berna es un perro de asistencia que además es el más carismático de una asociación sueca de perros de ayuda social. 
Son de los mejores perros que puedan existir para los niños por su paciencia, su cuidado y ternura, su equilibrio psíquico, por su capacidad de juego y su capacidad de protegerles sin agresividad. Por eso es aquí en Suecia un perro bastante popular y ¡ojo! no por ello han descuidado su carácter, pues aquí se selecciona esto con esmero por eso de que el perro no es un mero objeto decorativo ni para dejar en el jardín ni para deshacerse de él cuando a uno le viene en gana.
Tengo que reconocer que es un perro que me llamaba mucho la atención. Conocí esta raza en los años 80 en España, en la Exposición Internacional de Valladolid. Recuerdo que era un extraordinario ejemplar, un gran campeón, cuya apariencia impresionaba. Era de una belleza espectacular, grande, poderoso y de bonita cabeza. En la foto siguiente estoy en los Alpes de Suiza, en las faldas del Mont Blanc, en el año 1993, y ya trabajaba como adiestrador de perros. Aquél boyero de Berna me dejó encandilado.
Menos popular es el Gran Boyero Suizo. Es el más grande de los boyeros suizos, con un par de centímetros más de alzada que el bernés según el stándard. Supongo que es menos popular porque tiene el pelo corto, lo que le hace menos atractivo y le da un aspecto más serio. En España no se ven. De hecho, yo mismo no he visto nunca en España esta raza. La foto siguiente es aquí en Suecia, donde podéis verlo en pleno centro de una ciudad, paseando él solito al bebé de la casa mientras los padres trabajan. Y, como podéis ver, lo pasea correctamente por el carril-bici, como ha de ser.
Impresionante, ¿no creéis?.
Bueno, era broma. En esa foto, que hice en el otoño de 2008, la madre del bebé y propietaria-madre del perro, quedó oculta fortuitamente tras esa pareja. Ahora os pongo otra:




No hay comentarios:

Publicar un comentario