lunes, 24 de junio de 2013

EXHIBICIONES CANINAS BONITAS Y MODERNAS.

Os dejo dos vídeos en los que podéis ver una exhibición de educación y habilidades caninas realizada por Hund Akademin en Suecia. Imaginación, control de los perros, buen vínculo basado en respeto, juego y cariño. El segundo vídeo es un teatro realizado seguidamente con los mismos perros. Como véis, las posibilidades son increíbles. Una actividad realizada con cariño y profesionalidad.

 http://www.youtube.com/watch?v=Ui7tIxE6yso


En el teatro se representa el cuento de La Bella Durmiente. Los perros interpretan los diferentes papeles. Por si no entendéis lo que sucede, os lo cuento abajo.

http://www.youtube.com/watch?v=6UE1FnG0AyE 

Veis al rey tumbado esperando... porque no consigue tener un hijo. Mientras la reina -y otra- lava, tiende y plancha la ropa... se anuncia que la cigüeña trae una princesa muy "pequeña" (represetada por el perro más grande del equipo, un dobermann). Para celebrarlo, se organiza un gran fiesta... (la perrita ladrador pone la mesa y el pastor australiano prepara la olla con verduras) a la que se invitaron a las hadas de la corte, que sólo podían comer en platos de oro... hubo una a la que no pudo invitarse por falta de plato. 
El día de la fiesta llegó y cada hada le dio un don a la princesa. Una la concedió belleza, otra bondad, otra inteligencia... En este caso, la traen regalos; un springer spaniel trae un libro, el pastor australiano un osito en un maletín, otro pastor australiano, que es el hada que no había sido invitada, la trae un tridente, enfadada, y la lanza una maldición: en su 15º cumpleaños, la princesa se pinchara con un huso de hilar y morirá. El rey (golden retriever), se tumba... horrorizado. Y el hada desapareció. Pero apareció otra hada (representada por la labrador retriever), que aún no había hecho su regalo a la princesa, y cambió la maldición: en vez de morir, la princesa y todos los habitantes del palacio quedarían dormidos durante 100 años. El rey, para que no se cumpliera la maldición, ordenó que todos los husos y ruecas fueran quemados. 
Cuando la princesa cumplió 15 años, la princesa (dobermann) estaba paseando por palacio... y vio una señora (pastor australiano) hilando en una rueca. La princesa había olvidado la maldición, y a pesar del aviso de su padre, se puso a hilar y se pinchó con el huso. La señora rió a carcajadas. La princesa tenía mucho sueño, se fue a la cama y se quedó dormida. Todos en el palacio quedaron dormidos durante 100 años. Entonces, un príncipe (pastor australiano), que había escuchado la leyenda, fue al castillo. Al ver a la princesa, la besó y todos los habitantes del palacio despertaron. El príncipe y la princesa se casaron y en la palacio se hizo una gran celebración.

Que lo disfrutéis.